Respecto a los buenos momentos, quedan grabados recuerdos irremplazables. Pensamos en aquella vez que le contamos nuestro secreto mejor guardado a aquel amigo cercano, o aquella ocasión en la que reímos hasta sentir dolor en las comisuras de la boca... Pensamos en toda la gente que nos hizo sonreír una vez y les recordamos con cariño. Algunas de esas personitas continúan formando parte de nuestras vidas, otras desviaron sus caminos hacia lugares algo más alejados. Pero todas ellas estuvieron a nuestro lado compartiendo momentos, tanto de tristeza como de felicidad, tanto de sus vidas como de las nuestras. Fueron parte importante de historias, recuerdos y experiencias.
Muchas veces me paro a pensar en todas las cosas que he vivido y en la gran importancia que tuvo la gente que intervino. Me gustaría agradecerles todo lo que hicieron por mí. Cada sonrisa, cada abrazo, cada conversación... Y si lo pienso con mayor profundidad, en muchas ocasiones ni siquiera le di importancia a estos gestos, ni siquiera se me pasó por la cabeza que años después los recordaría con tal aprecio.
Por eso, desde hace un tiempo agradezco y valoro mucho más los mínimos detalles. Disfruto de todo lo disfrutable, me siento afortunada de poder contar con buenos amigos y me aporta felicidad cada momento que paso con ellos.
Alicia JSAD